Etcétera (CAR-ta 2)

Composición churrigueresca cortesía de Car...

****Pauline*****

Etc…

Etcétera es la palabra mágica, que, aunque abreviada, nunca va sola, siempre tiene a sus puntos suspensivos a su lado, y, aunque no dependen ellos de ella ni viceversa, saben que, en el fondo, la vida sería más aburrida sin su mutua compañía, con susurros y sonrisas.

Etcétera es feliz porque sabe que significa “hay tanto aquí que no puedo describirlo con palabras”. Los puntos son igualmente felices porque saben todas las cosas importantes que simbolizan, esas que no se dicen, pero se intuyen, cada uno a su manera.

- ¿ A qué sabes hoy? – dicen los puntos a Etcétera.

- A cosita buena – dice Etcétera- a besos y caricias, a amor, a sumergirte en agua de mar y que te piquen los ojos y no te moleste.

- Nunca hemos conocido a nadie que tenga ese sabor – replican los puntos suspensivos – es bonito, porque sí que hemos conocido gente tan pobre que sólo tiene dinero, y no son nada sin monedas. En cambio tú…(puntos suspensivos)

- Sin monedas, sí, soy rebelde a mi manera. Y, aunque sube y baja mi esencia, la vida va en serio, y, al igual que “Superman” es “La Pasión de Cristo” con leotardos, el amor plastificado es un beso sin sonrisa.

Se oyeron susurros de complicidad. Quizá sea porque nadie entendía qué hacía aquel cuadro de un gato en el que ponía “madcat” atada a una vespa italiana. No pensaron demasiado hasta que el gato salió del cuadro y, acercándose muy lentamente y con cierta timidez, dijo:

- Etcétera es todo aquello que no nos atrevemos a olvidar.