Miseria de Dickens.
Titolino a.k.a Mantecao de aceite de oliva.
No se puede ser y no ser algo al mismo tiempo y bajo el mismo aspecto.
Aristóteles.
Al marisco en mal estado.
"Sentado en la calle Silencio
como una bolsa de kikos,
uno a uno,
cada cual con su pensamiento.
Celebro no ser hijo
de Dios Padre Todopoderoso
creador del cielo y la tierra
y de toda esta mierda
de calles que suenan
a monedas perdidas
y a risas de familias con careta.
Miseria de Dickens
regalo a las almas
entre bigotes de gambas.
Rojeces de calendario
te hacen sentir todo o nada,
cultura cristiana picando nuestras cabezas
con la misa del gallo necio;
no se lo cree ni el Cobra
borracho en un ricón,
el rollo de la salvación
envuelto en papel de regalo.
Paz y amor nos trae el niño Dios,
los platos de lentejas
no se llenan con retórica insultante.
Tengo un mantecao de aceite de oliva
en el corazón cuando reflexiono
sobre como los humanos
transmiten emociones genéricas
en conversaciones telefónicas.
Macdonalización de la cultura
nos chupan la sangre como a ratas,
sacan dinero hasta de las defecaciones,
el sudor del día a día.
¡Que aparezcan los fantasmas
del pasado, presente y futuro!,
no hemos aprendido nada.
Se vende materia libre de alma
para satisfacer a cualquiera,
dicen los escaparates
al paso de las enajenaciones felices.
Dedico estos versos
a todos los niños somnolientos
sentados en una silla
mientras sus padres hablan
al acabar la cena."
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